Diego Pereira
Casi me hago abogado / @algunpereira
La semana pasada el semanario Hildebrandt en sus trece publicó un exclusivo reportaje, escrito por Martín Hidalgo. ¿Qué tiene de exclusivo? Pues que recoge el testimonio de una de las tres testigos que afirman que el Fiscal de la Nación, Carlos Ramos Heredia, visitaba a Rodolfo Orellana (Voldemort) con frecuencia.
Si te estás preguntando qué tiene esto de malo, fácil necesitas refrescar tu memoria con todos nuestros posts sobre Orellana.
Si incluso luego de leerlos una nueva duda te asalta, respecto a qué tiene de malo que el Fiscal de la Nación sea extremadamente amistoso con el corrupto empresario, te lo ponemos en letras grandes y bonitas:
La investigación realizada contra Orellana por el Congreso terminará en el Ministerio Público, donde está sentado Ramos Heredia.
¿Más claro aún? Bueno, Augusto Álvarez Rodrich te lo explica así:
Es inaudito que Ramos Heredia siga siendo fiscal de la Nación pues, desde ese puesto, puede volverse un obstáculo crucial para que, efectivamente, se haga justicia, algo que es trascendental en este caso por todas las implicancias que tiene.
Ya pues, broder. Ahora ya no debería quedarte ninguna duda.
El testimonio
¿Recuerdan a María Zaplana? Era una abogada vinculada a Orellana en varios casos, como, por ejemplo, el de Alianza Lima.
Resulta que Zaplana, ante la comisión de Fiscalización del Congreso, lo contó todo. Ella conducía el programa “Negocios Inmobiliarios”, transmitido por Radio Miraflores pero producido desde la oficina principal de la red de Rodolfo Orellana.
En esa oficina vio muchas cosas. Así escribe Martín Hidalgo en el semanario:
Luego de dar detalles sobre la labor que realizaba, los congresistas le dieron una lista de nombres para que confirmara si él había visto a estos personajes en las oficinas de Orellana durante el tiempo que trabajó allí (entre noviembre del 2008 y setiembre del 2009). Al final del cuestionario, se le preguntó: “¿A qué otro funcionario público vio por los pasillos de la oficina de Guardia Civil?”.La respuesta de Zaplana fue contundente: “A Ramos Heredia, el actual fiscal de la Nación”. La investigada aseguró que lo vio ingresar a las oficinas de Orellana, en San Borja, “al menos una vez al mes”, durante el tiempo que trabajó en dichas instalaciones (once meses). Según su testimonio, Carlos Ramos Heredia ingresaba directamente a la oficina de Rodolfo Orellana Rengifo.
Por si te queda duda acá lo aclaro: este testimonio es comprometedor.
En una entrevista con Mávila Huerta en Canal N, María Zaplana evitó profundizar en las declaraciones publicadas en Hildebrandt en sus trece (dado que la sesión se realizó con carácter reservado). Sin embargo, en el minuto 2:30 enfatiza que habla con la verdad y que lo hará siempre (además, se quiebra):
Otra cosa, Zaplana ha pedido garantías por su vida ante la comisión y ellos también lo han hecho, sin embargo hasta ahora a la testigo hasta ahora no le han asignado ni un perrito chusco que ladra por todo.
Felizmente no ha sido amenazada (aún).
OJO: todo esto ha sido corroborado por otras dos declarantes: Adriana Angulo Delgado, quien tuvo un programa por internet también financiado por Orellana, y Rocío Rojas Castellares, que también trabajaba en la radio.
La primera asegura que en la navidad del 2008 los “abogados externos” recibieron un licor de regalo. Dentro de esos abogados estaba nuestro querido Ramos Heredia. Esto concuerda con lo que declaró Zaplana quien además nos suelta un dato hilarantemente hermoso: las secretarias de Orellana presentaron al ahora Fiscal de la Nación como “el doctorcito Ramos”.
El “doctorcito” caserito
Pero hay más. Un post de la Revista Poder en La Mula nos mete una refrescada de memoria tan brava que hasta las bacterias en nuestro cuerpo se indignan. En el 2011, la revista Juez Justo (el arma preferida de Orellana) publicó esta maravilla:
Poder explica el contexto de este tremendo cherry de Orellana al que ahora será su investigador:
La entrevista a Ramos Heredia se expande luego sobre el plan de trabajo que el funcionario iba a llevar a adelante para, supuestamente, limpiar de malos elementos al Ministerio Público. En esa misma edición de Juez Justo, y en portada, era atacada la procuradora Julia Príncipe, bajo el titular “¿Príncipe o vasallo?”, cuestionando su probidad frente a la procuraduría, la misma que venía investigando a Orellana.
Pero la relación Orellana – Ramos no terminó en el 2011:
El precedente
Recordemos que, en junio, Martín Hidalgo ya le había preguntado a Ramos si había recibido a Orellana en su despacho. Primero, el fiscal de la Nación lo negó pero luego, ante el Congreso, tuvo que admitirlo:
Tres fuentes congresales, presentes en la sesión reservada, confirmaron a este diario que Ramos negó conocer a Orellana, pero admitió haberlo recibido en su despacho.Según las fuentes, Ramos Heredia sostuvo que Orellana fue recibido como “un usuario” y que no sabía quién era cuando entró al despacho. Fuera de ello, no brindó detalles de la reunión ni de la fecha, pues cuando le repreguntaron si el encuentro fue dentro de los últimos 15 días, dijo que no.
Ojo que estas son reuniones distintas a las reveladas por Zaplana. Por cierto, ¿sabes qué ha dicho esta vez sobre esta última revelación? Estas son las declaraciones recogidas por La República:
Vamos a seguir investigando hasta el final. No le tenemos miedo, son manotazos de la mafia. Después de seis meses de investigarme y no encontrar nada, sacan estos testigos… Crean testigos sin darme oportunidad de replicar
Pero Ramos Heredia ya se quedó solo.
Renuncia, chato
Acá nos hemos sumado a la gente que pide la renuncia de Ramos Heredia. No estamos solos. La gente de Proética, el capítulo peruano de Transparencia Internacional, la ONG anticorrupción más importante del mundo, también lo quiere fuera. Tanto así que decidieron salir de la CAN (Comisión de Alto Nivel – Anticorrupción) mediante un comunicado recogido por La República. Aquí un extracto:
Es obvio que quien está investigado por presuntos vínculos con un grupo del crimen organizado, carece de legitimidad para estar al mando de la institución encargada precisamente de investigar y perseguir a ese grupo. Esta situación agudiza la crisis por la que atraviesa el Ministerio Público y contribuye a incrementar la desconfianza de la población en la fiscalía
Lo paja es que esta acción ha hecho que al menos un engranaje se mueva. Según informa IPYS:
Ante este llamado y luego de someterlo a discusión en el pleno, el ministro de Justicia, Daniel Figallo,pidió a Proética no abandonar el grupo de trabajo para lo cual se comprometió a enviar un oficio al Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) a fin de que resuelva pronto los procesos contra el fiscal Ramos Heredia y determine su permanencia o no en el cargo..
Por cierto, El Comercio también le ha bajado el dedo a Ramos en su editorial:
…Ramos Heredia debe entender que el ministerio público es el ente encargado de velar por la legalidad en nuestro país, y su principal referente debe ser una persona proba y libre de cuestionamientos. La autonomía de dicha institución es pilar fundamental de la democracia, por lo que, si el fiscal Ramos Heredia en serio dice respetarla, debe, por el bien del país, dar un paso al costado.
Ya mucho roche, ya.
http://utero.pe/2014/12/22/el-fiscal-de-la-nacion-era-caserito-de-orellana-a-que-hora-renuncia/
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